Arte digital y blockchain
Si hay algo por lo que destaca el siglo XXI es por los avances tecnológicos y culturales que presenciamos cada año. Por esta razón, hoy nos gustaría hablar de la combinación entre arte digital y blockchain.
Si no has oído hablar nunca acerca de la tecnología blockchain o aún no la entiendes, te recomendamos leer nuestro anterior artículo.
¿Qué es un NFT?
NFT es un acrónimo de «token no fungible» y se puede considerar como un objeto de colección digital.
Para entenderlo mejor, un token es una unidad de valor como las monedas, pero a diferencia de estas, los token son elementos digitales que principalmente se usan como medio de intercambio seguro y descentralizado.
Pero, ¿cuál es la diferencia entre objeto fungible y no fungible?
Los bienes fungibles hacen referencia a las cosas que se deterioran, se gastan, o se destruyen una vez son utilizadas. Estos bienes, están determinados según peso, medida o género, siendo posible sustituirlos por otros.
Por el contrario, los bienes no fungibles son los que no admiten ningún tipo de sustitución, al ser algo único y original, como por ejemplo una obra de arte. Es decir, poseen una individualidad única.
I’m selling this song about NFTs as an NFT pic.twitter.com/B4EZLlesPx
— Elon Musk (@elonmusk) March 15, 2021
Partiendo de esa base, un NFT es similar a una criptomoneda, ya que se negocia en una Blockchain y tiene un valor monetario adjunto. Sin embargo, la diferencia entre una criptomoneda y un NFT es que un NFT tiene ciertas características que la hacen diferente de otros NFT, incluso si los dos NFT parecen similares entre sí.
Por ejemplo, si intercambiamos un bitcoin por otro bitcoin, estamos intercambiando una cosa idéntica por otra. No hay pérdida de valor en ninguno de los lados de la transacción, al final ambas partes han terminando con un bitcoin. Pero si cambiamos un NFT por otro NFT, estos pueden ser drásticamente diferentes incluso si parecen ser iguales.
Esto se debe a que un NFT incluye una capa más profunda de características que lo hacen diferente de los demás. Estas características pueden incluir metadatos, imágenes, números de serie, etc. Todas estas características pueden afectar el valor del NFT.
Una de las últimas personas en sumarse a la ola de los NFT ha sido Elon Musk, el cual publicó un tweet mostrando su obra de arte no fungible.
Ecosistemas y aplicaciones de los NFT
Es interesante pensar en los NFT como una nueva tecnología sobre la cual se pueden construir productos y experiencias ya existentes, pero añadiendo beneficios adicionales, como la descentralización.
El ejemplo más claro para entender este enfoque lo podemos encontrar en la plataforma Decentraland, la cual contiene el primer juego basado en un mundo completamente descentralizado.
En el mundo de los juegos online, los tokens no fungibles permiten crear elementos dentro del juego que son únicos e intercambiables de forma libre entre jugadores, así como la compra/venta, o incluso la movilidad entre diferentes juegos.
En el caso de Decentraland, los usuarios pueden comprar y vender terrenos llamados Land. Estos terrenos son NFT, ya que cada parcela es diferente de la otra en términos de características, diseño y tamaño.
Podríamos decir que dicho mundo es similar a los SIMS o Minecraft, ya que encontramos gráficos simples y creaciones generadas por los propios usuarios, como por ejemplo, galerías de arte donde mostrar tu colección de NFTs.
Otros de los usos más comunes dentro del ecosistema de los token no fungibles son la creación de certificados, tarjetas comerciales y nombres de dominio. En resumen, todo aquello que debe ser verificable y único puede ser representado por un NFT.
Este ejemplo lo podemos encontrar dentro de la compañía española llamada Watafan y creada por el ex-futbolista Toni del Moral.
En dicha plataforma aficionados de cualquier género pueden intercambiar cromos exclusivos firmados por sus ídolos, y por otro lado, los famosos pueden controlar la gestión de su imagen gracias a los derechos de autor.
De esta forma, gracias al uso de la tecnología blockchain se puede asegurar la autenticidad y originalidad de la firma, y se pueden recibir, almacenar y negociar los cromos digitales, limitados y exclusivos.
Un paradigma con potencial pero incierto
Los NFT siguen siendo una tecnología relativamente nueva con un largo camino por recorrer. Además, en la actualidad, no son particularmente fáciles de usar para usuarios inexpertos, y dado que usan tecnología descentralizada, su escalabilidad es un poco complicada.
Sin embargo, dado que introducen nuevas funciones útiles que nunca antes habían sido posibles, es muy probable que esta tecnología crezca y se desarrolle a pasos agigantados.
