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En el 2020 hemos aprendido más que nunca en todos los ámbitos, pero sobre todo en el entorno laboral, provocando que de la noche a la mañana el equipo de trabajo tuviera que volverse más flexible y asumir el nuevo reto que nos suponía el teletrabajo.

Al igual que nos adaptamos a esta nueva forma de trabajar que llegó para quedarse en la mayoría de las empresas, estas tendencias que te describimos también están cogiendo fuerza y debes tenerlas en cuenta para aplicarlas a tu estrategia.

Paso del storytelling al storydoing

El storytelling es una técnica que trata de contar una historia para conectar con el público utilizando el componente emocional. Además, ayuda a mejorar uno de los intangibles más importantes como es la reputación.

Pero todo ha cambiado con la era digital y estamos obligados a renovarnos o desaparecer.

Es evidente que la gente ya está cansada de oír una simple historia, pero eso no significa que vayamos a descartar el storytelling, sino que lo vamos a mejorar usando en nuestra estrategia el storydoing para que el usuario ya no solo escuche, sino que viva la experiencia y se sienta involucrado pasando a ser el protagonista.

 Uno de los ejemplos más famosos y que la mayoría conocemos es la campaña de Red Bull con la que se consiguió el récord en salto desde la estratosfera. La marca ya no solo contaba una historia, sino que la llevó a cabo haciéndola realidad, lo que provocó que los espectadores estuvieran atentos a lo que sucedía y que la campaña se hiciera viral en redes sociales.

La clave es que de acuerdo con nuestros objetivos y valores nos adaptemos y aprovechemos está técnica para reforzar nuestra imagen y credibilidad.

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Omnicanalidad

En muchas ocasiones se confunden los conceptos multicanal y omnicanal porque ambas formas de distribución están compuestas por distintos canales físicos y digitales, pero la diferencia es simple.

Si utilizamos una estrategia multicanal los usuarios podrán obtener nuestro producto o recibir diversas formas de comunicación por diferentes canales sin ser un proceso integrador.

Por el contrario, la omnicanalidad se caracteriza por sus canales unificados y la experiencia única del usuario. Por ejemplo, el cliente tiene la posibilidad de comunicarse con la marca a través de Instagram, pero igualmente puede enviar un correo o visitar la tienda física y recibirá las mismas ofertas o promociones, es decir, la experiencia será igual de personalizada en los distintos canales.

Esta última estrategia de comunicación ha llegado para quedarse y se refuerza con el tiempo por la tendencia creciente de las compras por internet.

Lo ideal es que solo utilices los canales necesarios y que encajen con tu producto, servicio o marca. ¡No te precipites!

Hemos pasado de los eventos tradicionales a los virtuales. Eso no significa que intentemos hacer de forma online lo mismo que estábamos acostumbrados a llevar a cabo en los tradicionales.

Aún nos queda mucho por aprender, pero estos meses hemos sabido disfrutar de los eventos virtuales y eliminar la imagen tediosa e impersonal que los identificaba. Además, nos permiten reducir los costes, realizar con mayor facilidad la recogida de datos, aumentar la asistencia y la visibilidad, ya que su promoción nos permite llegar a un gran número usuarios y tenemos la oportunidad de demostrar que somos innovadores.

No podemos quedarnos parados, hay que ser creativos y crear un gran evento virtual para transmitir los mejores valores de nuestra empresa, puesto que estos eventos se seguirán desarrollando en un futuro.

Realidad aumentada e inteligencia artificial

La realidad aumentada y la inteligencia artificial se convierten en unas  de las tendencias más importantes para diferenciarse de la competencia y asegurar una buena experiencia al usuario con nuestras campañas de publicidad.

  La inteligencia artificial sirve para mejorar la eficiencia, la comunicación, el análisis de los datos…

  La realidad aumentada favorece una publicidad personalizada, por ejemplo, si hablamos de ropa o maquillaje le da la oportunidad al cliente de probar el producto y ver cómo le queda. También,  está la posibilidad de visualizar objetos como un mueble nuevo o un coche en tu casa antes de comprarlo.

Con esto nos damos cuenta de que son técnicas que pueden resultar atrayentes y divertidas para el público. Además, suponen una gran innovación para tu marca en estos tiempos donde los usuarios prefieren las compras online.

El papel del prosumidor

El consumidor hace ya un tiempo que dejó de tener un papel pasivo con el desarrollo de las RRSS y comenzó a generar contenidos e identificarse como prosumidor, término creado por Alvin Toffler en su libro La tercera ola.

Favorecer que los prosumidores den su opinión o creen contenido relacionado con el producto o servicio es la clave.

Muchas empresas utilizan a este usuario para conocer las necesidades y preferencias de los consumidores. De esta forma se podrán llevar a cabo mejores estrategias para llegar a un gran público o fortalecer la relación con sus clientes actuales.

Además, es muy importante la experiencia del cliente y la interactividad en redes sociales.

Marcas como Airbnb toman ideas de los prosumidores para crear contenido, utilizando contenido visual o comentarios de sus usuarios en redes sociales para su estrategia de marketing. Publican experiencias y fotografías realizadas por los huéspedes para que el contenido sea más creíble.

Estas son solo algunas tendencias que debes tener en mente y que han terminado consolidándose, pero hay muchísimas más que quedan por descubrir para estar preparado en esta nueva realidad del marketing digital.

¿Qué piensas? ¿Crees que te ayudarán en tu negocio?

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