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Saber qué piensan otros. Esta es una de las claves para lograr tener éxito en acciones de marketing, publicidad y comunicación. En cultura corporativa no es menos importante. Necesitamos saber qué piensa el equipo sobre la empresa para orientar nuestra estrategia interna, es posible que haya percepciones discordantes, aspectos de corregir u optimizar. 

Cada vez es más común tomar la temperatura a tu equipo regularmente, y no hablamos de fiebre, Covid y termómetros; hablamos de opinión, clima y felicidad. Las empresas están esforzándose en mejorar el ambiente de trabajo e impulsar su cultura corporativa, y hacer esto sin conocer el punto en el que estás a través de una encuesta, es como conducir con los ojos vendados.

Las encuestas de clima o encuestas de satisfacción interna nos quitan la venda de los ojos a la hora de saber qué piensa el equipo sobre la empresa, si el ambiente es bueno, si el liderazgo se está ejerciendo correctamente, si se sienten escuchados y valorados, si echan en falta alguna medida que debería tomar la empresa, y un largo etcétera. 

Las encuestas de clima o satisfacción son clave para planificar acciones internas pero también son determinantes en la productividad. Estas encuestas son capaces de aflorar problemas en la plantilla de forma prematura, por lo que son muy interesantes desde el punto de vista de una gestión previsora y con enfoque de mejora continua. Además son muy económicas, podemos contar con un proveedor experto, pero también podemos hacerlo nosotros mismos a través de herramientas gratuitas o freemium como Survey Monkey o Google Forms. En estos casos seremos nosotros mismos quienes deberemos analizar los resultados obtenidos, y ser lo suficientemente objetivos y astutos para detectar no solo lo patente sino también lo latente. 

En casos de plantillas muy grandes, es conveniente analizar los resultados  de manera segmentada por departamentos, niveles de empleados o centros de trabajo, dado que al analizarlos de forma conjunta podemos no advertir que tenemos un problema en un determinado punto geográfico o grupo de trabajadores. En estos casos, en los que la empresa es grande y/o con cierta complejidad estructural, sí es recomendable contar con profesionales en análisis de clima. 

Encuestas de clima y cultura corporativa

Para una empresa que gestione de forma estratégica la cultura corporativa resulta indispensable realizar una encuesta de clima al menos una vez al año. Si la empresa en cuestión acaba de comenzar a trabajar de forma activa su cultura corporativa también deberá realizar una encuesta de clima para conocer en qué punto se encuentra su cultura, puesto que esta, si la empresa existe desde hace tiempo, nunca parte de cero. 

Cuando la encuesta de clima va orientada a crear cultura en la empresa, las preguntas irán encaminadas a descubrir aspectos como:

  • Qué imagen tiene el empleado de la empresa
  • Si recomendaría a un amigo o familiar trabajar en la empresa
  • Cómo es la relación con los compañeros y superiores
  • Si existe un ambiente propicio para comunicar libremente opiniones o sugerencias
  • Conocer qué canales de comunicación internos se usan y cuáles no están llegando
  • Si reconoce el equipo los valores de la empresa en las decisiones que se toman
  • Si se está orgulloso de pertenecer a la organización

Existen otros aspectos muy importantes que tienen que ver no solo con la cultura, sino también con la gestión de personas y que son muy útiles para el departamento de recursos humanos, como pueden ser cuestiones relacionadas con el salario, horarios, flexibilidad, vacaciones, conciliación, igualdad. Estas cuestiones son también importantes para la cultura de la empresa en cuanto a que afectan a la felicidad de los trabajadores, y la felicidad en el trabajo va a ser, 99’9% seguro, parte de lo que queremos en la cultura de nuestra empresa. 

Debemos ver las encuestas de clima como una herramienta para la buena gestión de la cultura corporativa, pero también como cultura corporativa en sí mismas, dado que querer escuchar a tu equipo para mejorar es parte de nuestra forma de hacer las cosas y dice mucho sobre la compañía. 

Claves de una buena encuesta de clima

Si nadie nos frena, nuestro afán por saber nos llevaría a realizar una encuesta con 30 o 40 preguntas, pero esto convertiría nuestra encuesta en un fracaso. Por eso es importante que nuestra encuesta sea lo más breve posible (20 o 25 cuestiones estaría bien). También es muy interesante que la encuesta cuente con espacio donde el empleado se pueda expresar libremente. Se trata de algo que puede dificultar el análisis posterior pero es de lo más revelador que podemos encontrarnos. Esto es así porque, sobre todo si la encuesta la diseñamos desde la propia empresa, la estamos diseñando con un gran sesgo de partida. Esto quiere decir que estamos haciendo las preguntas de las respuestas que queremos recibir, es inevitable y también ocurre al analizar los resultados. Por ello, para paliar un poco este efecto de sesgo, debemos dejar varias respuestas libres donde el empleado puede desvelarnos aspectos muy interesantes que nuestra encuesta ni siquiera estaba contemplando. 

Por supuesto la encuesta debe ser anónima si queremos respuestas sinceras y libres. Por mucho que pensemos que en nuestra empresa existe un ambiente de total libertad para hablar sin miedos, seguramente no sea así. Además lo importante es qué se siente, no quién lo siente.

Si la transparencia forma parte de nuestra cultura corporativa (que debería), los resultados, una vez analizados, deberían hacerse públicos entre la plantilla. Por satisfacer la curiosidad innata del ser humano y por honestidad con nuestro equipo, pues esto hace, en cierto modo, a los resultados vinculantes y legitima las medidas que se tomen para mejorar los puntos débiles que haya desvelado la encuesta. 

También son muy importantes los resultados para los mandos intermedios. Muchas veces la cultura de la empresa queda en manos de los mandos intermedios, que son quienes están en contacto directo con el equipo y quienes al final deciden si trasladan el talante de la empresa o ponen en práctica el suyo propio. Cuando esto ocurre empiezan a crearse culturas paralelas, y es posible que veamos que suman y tengamos que adoptar el know how de ese mando intermedio, o puede que resten y tengamos que corregir. 

Cuándo realizar una encuesta de clima

Como hemos mencionado, debería hacerse cada año, pero además, dentro de ese periodo, es necesario elegir bien el momento. El sesgo es nuestro enemigo y para huir de él debemos alejarnos de momentos de distorsión, como pueden ser por ejemplo la vuelta de vacaciones de verano, tras haber sufrido una carga de trabajo intensa o después de realizar ajustes en la plantilla. A final de año es buen momento, si no ha habido cuestiones particulares que puedan provocar una alteración de los resultados, porque tenemos la sensación de cerrar un ciclo. Muchas empresas eligen el mes de noviembre o la primera semana de diciembre para hacerlo, dado que si lo hacemos muy cerca de Navidad, cuando se hacen regalos a trabajadores, pagas extras, o tienen lugar las cenas de empresa (las oficiales y las no oficiales), los resultados se pueden ver alterados. 

Recuerda, las encuestas de clima son información de gran valor para mejorar la productividad, la retención de talento y la cultura corporativa de tu empresa. Las encuestas de clima son cultura corporativa.